Van Halen recuperan la credibilidad

Creo que ni los más optimistas esperaban un álbum de este calibre. Personalmente, a estas alturas de película, me hubiera contentado con un trabajo digno, que no nos hiciera sonrojarnos al oírlo. Pero no, amigos, los Van Halen de los primeros 80 están de vuelta…y de qué forma. Menudo pepinazo de disco que se han marcado!!!

Cuando comenzaron a llegar noticias de que entraban en estudio, el referente parecía ser su “1984”, por eso de que fue la última vez que grabaron con David Lee Roth. Pero, a diferencia de aquel, aquí no hay sintetizadores ni concesiones a la galería. El conjunto suena chulesco, cañero y tremendamente clásico y enérgico. Con toda la banda rayando a gran nivel, incluído Diamond Dave. Pero, por supuesto, los grandes protagonistas son Eddie y su guitarra, con un trabajo de quitarse el sombrero. Canción tras canción, riff tras riff, solo tras solo, uno vuelve a darse cuenta de que estamos ante uno de los grandes genios que nos ha dado el mundo de las seis cuerdas.

Desde su inicio con “Tattoo” (digan lo que digan, un gran single), “She's the Woman” (brutal!!!), “You and Your Blues” (grande la voz de David), “China Town” (doble bombo marcando un ritmo diabólico) y “Blood and Fire” (con un solo de piel de gallina) ya se ve que claramente la cosa va en serio. Pero el nivel no decae y aún nos queda recibir, entre otros cuantos, a los que probablemente son los dos mejores cortes del álbum: ese “Hot for the teacher” del siglo XXI llamado “As is” (tremendo riff de guitarra!!!) y una deliciosa vacilada bluesera de nombre “Stay Frosty”. 

En definitiva, podemos decir que los fans del classic rock estamos de enhorabuena. Ahora sólo queda que Eddie y sus chicos se dignen en cruzar el charco para venir a presentárnoslo.