10 años sin Joey Ramone

El 15 de abril de 2001 quedó marcado para siempre como uno de los días negros de la historia del Rock&Roll. El gran e inigualable Jeffrey Hyman nos dejó después de perder la batalla contra un linfoma con el que llevaba luchando tiempo atrás.

He de decir que Joey siempre fue mi Ramone favorito. Un músico que no daba para nada el perfil de la típica Rock Star, sino más bien todo lo contrario: larguirucho cual espárrago, feo como un demonio, introvertido y aquejado de diversos problemas médicos desde su infancia (padecía desorden obsesivo-compulsivo, además de una severa miopía  y graves problemas de espalda). Pero que aún así, supo gracias a la música, sobreponerse a todo ello y convertirse ya no sólo en un mito para los miles de fans ramonianos a lo largo de todo el mundo, sino también en alguien tremendamente apreciado por aquellos que pudieron tratar con él de forma directa (hago esta afirmación en base a todos los comentarios que he podido leer y oír al respecto).

Baste señalar el homenaje que la ciudad de Nueva York le hizo en 2003 (no a la banda, sino a él personalmente), colocando su nombre a una plaza cercana a la mítica sala de conciertos CBGB.

Valga este post como recuerdo. Allá donde esté, no le olvidamos…

Grande Joey!!! Hey ho let’s go!!!